CONTACTO

sábado, octubre 08, 2011

Los comienzos

 Los comienzos, la verdad, fueron un poco lentos. Los castings tardaban en llegar y este es un medio, como sabemos, en el que cuesta entrar. La carrera se hacía de fondo.
Pero poco a poco fueron saliendo fotos, rodajes, maquetas para concurso, etc. Fui conociendo los formatos, la estética (aunque cada uno tiene su criterio), los diafragmas, los Kelvin, la luz de contra, la foto sin flash ( ahí sí que hay que tener buen pulso), el sube y baja un tercio de punto. Porque había un denominador común, el resultado no se conocía hasta que no se revelaba. Y retocar, con soporte de película, era bastante caro.
De las fotos había de todo tipo (no como ahora, que parece que solo hubiera teléfonos y cámaras digitales). Y hablando de teléfonos aquí está el primero. Creo que no queda ninguna duda que es de los comienzos. La foto es de Rodolfo Gómez. La otra foto es de Alberto Chaktoura, uno de los primeros fotógrafos en contar con mis servicios, que más adelante, cuando las cosas se pusieron un poco mal, se marchó de España.


Una de las primeras productoras que contaron conmigo fue Mima Films, que se trasladó a Miami como Mia Films, y actualmente es Red Magma Media. Hubo anuncios de todo tipo, hechos con mucho esmero, dedicando su debido tiempo a cada cosa. Algunos de ellos rodados, en ciertos planos, con el Motion Controller.
Aún recuerdo aquel de "la copa Danone" en el que colocaron el fondo, con su luz, después el producto, y a su alrededor todo tipo de trípodes, spotlight, cremer, wide diffusion, sombras, etc, para terminar introduciendo en todo ese laberinto la cabeza (pequeña óptica) del Motion Controller, centrada milimétricamente. Ahora coge la copa (del tamaño de un yogurt), sácala y rodamos la colocación, exactamente donde estaba. La primera pregunta fue ¿por donde?, si no había el mas mínimo espacio para coger la copa, y menos para colocarla. Después de abrir un hueco en un wide diffusion y hacer de contorsionista, ya podía coger el producto y por ahí mismo hacer su entrada en plano, sin poder ver, realmente, el punto en que debía ser colocado (milimétricamnete centrado anteriormente). Salió a la primera, pero después hubo unas cuantas tomas que no había forma. Y es que muchas veces, al preparar un bodegón, no se piensa que por ahí debe entrar una mano, y ¡no una gadgetomano!